El personal tanto de recepción como del bar-restaurante fue increíblemente atento y amable, lo que definitivamente mejoró nuestra experiencia.

La habitación que nos asignaron carecía de buena insonorización, y se escuchaban claramente las conversaciones desde la recepción, lo que interrumpió la tranquilidad que buscábamos.

La suite que elegimos era amplísima, con un jacuzzi que fue un gran detalle. Además, la decoración única y detallista del hotel se convirtió en parte del encanto de nuestra estancia. La atención de Diego en el restaurante fue excepcional.

el entorno es muy agradable y natural. el desayuno carece de opciones integrales.

la suite canela no solo era antigua, sino que tenía el baño en un nivel y la cama en otro, una verdadera pesadilla. además, no hubo un gesto de cortesía por parte del personal, a pesar de los inconvenientes. casi escribo una buena reseña, pero aquí estoy, decepcionada. no vuelvo, y nunca lo recomendaré.

100% recomendable for una noche

Encantador lugar, acogedor restaurante, ideal para descansar después de un día de senderismo por las rutas cercanas, además cuenta con un bar muy agradable para relajarse con una bebida.

Estoy satisfecho con todo.

Me encantó la habitación amplia y cómoda, perfecta para desconectar. Además, el lugar es muy tranquilo ¡ideal para una escapada!

El servicio de cena fue más improvisado que un mago sin sombrero.

combinación de belleza y áreas de mejora

El entorno natural es asombroso, ofreciendo paz y tranquilidad. La habitación era espaciosa y muy cómoda, perfecta para relajarse. El desayuno fue uno de los mejores aspectos, con opciones frescas y sabores deliciosos.

Sin embargo, notamos que la habitación no tenía calefacción, lo cual fue un inconveniente dado el frío que hacía.

El entorno es asombroso, ideal para desconectar.

El desayuno fue excepcional, con una variedad de

opciones que hicieron nuestra estancia muy placentera. Los huevos preparados a pedido son un gran detalle. Sin embargo, noté que la habitación era un poco ruidosa y necesitaba una mejor insonorización. El personal fue siempre atento y servicial.

Me encantaron las casas y jardines que rodean este lugar. La habitación era amplia y muy cómoda. Ofrecen zumo de naranja natural en el desayuno, lo que fue un buen detalle. Además, el ambiente es ideal para relajarse.

La habitación que nos asignaron era preciosa, decorada en rosa, con un estilo ecléctico que me encantó. La tranquilidad del entorno es maravillosa. el paraje natural es digno de ver. El desayuno fue uno de los puntos altos. me encantó que preparaban huevos al gusto y podías disfrutarlo en la terraza con tu perro, todo muy rico. Sin embargo, había problemas de limpieza en el acceso al patio del restaurante, con huellas de manos que no se limpiaron durante nuestra estancia. La insonorización en la habitación no era la mejor. se escuchaba el ruido de las conversaciones en recepción, lo que interrumpía un poco la paz que buscábamos. A pesar de esto, el personal fue muy amable y servicial, lo que hizo la estancia más agradable. En resumen, muy bonito, pero podrían mejorar algunos detalles de limpieza y sonido.

El desayuno tenía opciones básicas pero de excelente calidad (el pan para tostar estaba delicioso! ). La habitación era maravillosa, con una bañera gigante donde caben dos con soltura. Los productos de la cena eran de primera calidad, ¡mamma mía!.

Sin problemas.

Este lugar me queda perfecto y ofrece todo lo que necesito, desde wi-fi y un bar acogedor hasta un restaurante encantador y opciones de senderismo. En mi primera visita, el personal me dio consejos sobre dónde cenar, lo recuerdo bien. ¡Lo recomiendo para una escapada o viaje de negocios!